El Síndrome de Pie Diabético es una de las complicaciones más graves de la Diabetes mellitus y la principal causa de amputación mundial de pierna y pie de origen no traumático. La enfermedad de Pie Diabético se da en personas con Diabetes tipo I y Diabetes tipo II.
Cuando los niveles de azúcar en sangre están descontrolados, durante un período prolongado, se acaban dañando los nervios y los vasos sanguíneos de los pies y las piernas. Estas alteraciones tienen el nombre de neuropatía diabética y enfermedad vascular periférica. Además, la Diabetes mellitus provoca alteraciones en los riñones (nefropatía diabética), en la visión, el corazón, el sistema inmune, etc.
Como consecuencia de las alteraciones que hemos comentado, se produce una pérdida de sensibilidad en los pies, disminución del flujo sanguíneo, mayor riesgo de infección grave (gangrena) de las heridas y la piel. Todo esto hace que se dificulte la cicatrización de las heridas.
Cuando las úlceras son muy grandes o llevan mucho tiempo abiertas y no se pueden curar con un tratamiento conservador, es necesario amputar parte del pie o incluso parte de la pierna para que la infección no se extienda a otras partes del cuerpo.
¿Sabías que el 85% de los casos de amputación de miembro inferior va precedida de una úlcera en el pie?
¿Sabías que cada 20 segundos un paciente sufre una amputación de una pierna como consecuencia de la Diabetes en algún lugar del mundo?
¿Sabías que la mortalidad y los costes sociosanitarios del tratamiento del Pie Diabético son superiores a los de los cánceres más comunes?
Estos datos tan alarmantes y llamativos son desconocidos por gran parte de la población. En muchas ocasiones, siguiendo unos cuidados básicos y realizando las revisiones necesarias se pueden evitar las úlceras y las amputaciones. Por eso, desde nuestra clínica podológica en Madrid, vamos a facilitarte los consejos clave para cuidar de la salud de tus pies si eres diabético o para que los compartas con alguna persona que lo sea.
¿Cómo prevenir el pie diabético?
Según las Guías del International Working Group of Diabetic Foot (IWGDF), son cinco los elementos clave para prevenir la ulceración en los pies de las personas con Diabetes. A continuación, explicamos de manera detallada cada uno de ellos:
Conocer si un pie tiene riesgo de úlceras.
Debido a la neuropatía diabética, los nervios se dañan y se pierde la sensibilidad. Secundariamente a ese daño, en muchas ocasiones no se nota dolor, calor, vibración y presión en los pies. Por eso, la ausencia de síntomas (dolor, molestia, etc.) en una persona con diabetes no excluye la presencia de enfermedad del pie.
En la consulta de podología especializada en pie diabético, se realizan diferentes pruebas para comprobar si hay una buena percepción del dolor y sensibilidad. En base a estas pruebas, se establece un nivel de riesgo y se recomienda al paciente con qué frecuencia debe acudir a consulta.
Inspección y exploración periódica del Pie Diabético o pie de riesgo.
Como hemos comentado, muchas veces no se percibe el dolor. Por eso, es importante revisar los pies en casa frecuentemente en busca de heridas o zonas en las que la piel haya cambiado y se vea, por ejemplo, enrojecida o irritada.
Realizar una inspección visual de los pies a diario, puede ayudar a detectar cualquier cambio o anomalía a tiempo. Examinar si hay heridas, ampollas, hinchazón, uñas infectadas o cambios en la temperatura de la piel, es importante para vigilar y anticiparse a cualquier problema mayor que pueda surgir.
Si observas alguna anomalía o signo de alerta, no dudes en consultar con tu podólogo de confianza.
Adicionalmente, el podólogo especialista en pie diabético identificará aquellas zonas en las que hay deformidades o puntos de excesiva presión susceptibles de ulcerarse en un futuro y los tratará.
Mantenerse informado acerca del Pie Diabético.
El podólogo especialista en pie diabético y todos los profesionales médicos encargados del tratamiento de la Diabetes mellitus y del Síndrome de Pie Diabético facilitarán la información necesaria para identificar úlceras, infecciones, calzado adecuado, cómo curar las heridas en casa, etc.
Es importante conocer aquellos hábitos que pueden mejorar el pie diabético: controlar los niveles de azúcar en sangre, tomar o inyectarse la medicación regularmente, llevar una dieta saludable para diabéticos, uso de calzado adecuado para cada tipo de pie y realizar ejercicio físico con regularidad.
Además de informarle de otros hábitos que pueden empeorar el pie diabético. Por ejemplo, El consumo de tabaco y de alcohol empeoran la circulación sanguínea y, por lo tanto, aumentar el riesgo de complicaciones en los pies.
Utilizar habitualmente un calzado apropiado.
En personas con diabetes e insensibilidad en el pie, el uso de zapatos inapropiados o caminar descalzos, son las principales causas de ulceraciones y pie diabético.
Es fundamental utilizar zapatos cómodos y adecuados para proteger los pies. Para elegir qué zapato es el mejor se debe tener en cuenta el largo y ancho del pie, para asegurar que no opriman y proporcionan el suficiente espacio para los dedos, la longitud interior del calzado debe ser de 1-2 cm mayor a la longitud del pie y no debe ser ni ajustado ni muy holgado. Preferiblemente, buscar calzado sin costuras o elementos que puedan causar roces.
Aquellos pacientes que presentan úlceras o las han tenido previamente, deben llevar un calzado terapéutico especial. Su podólogo especialista de pie diabético, evaluará todos los aspectos del pie para poder pautarle o recomendarle cuál es el mejor calzado para evitar otras complicaciones relacionadas con el pie diabético.
Tratar los factores de riesgo a los que se asocian las ulceras de Pie Diabético.
En la mayoría de pacientes con Síndrome de Pie Diabético, antes de que se forme la úlcera el pie presenta diversas alteraciones. El tratamiento de estas alteraciones es esencial para prevenir las úlceras en el pie.
El podólogo especialista en pie diabético, no solo se encarga de curar las úlceras. También de eliminar el exceso de callosidades, proteger las ampollas o drenarlas, tratar apropiadamente las uñas encarnadas o las uñas engrosadas y prescribir antifúngicos para las infecciones de las uñas y la piel causadas por hongos. El podólogo especialista también puede realizar cirugías para corregir los dedos en garra y otras alteraciones relacionadas con la aparición de úlceras.
A nivel individual, es importante mantener una higiene adecuada de los pies. Algo tan sencillo como lavar los pies a diario con agua tibia y jabón neutro, secarlos cautelosamente prestando atención a los espacios entre los dedos y aplicar una crema hidrante puede jugar un papel fundamental para evitar las úlceras de pie diabético.
Nuestro consejo: visita regularmente a tu podólogo especialista en Pie Diabético.
Es importante realizar revisiones regulares con un podólogo colegiado, preferiblemente si se encuentra especializado en el tratamiento de la Enfermedad de Pie Diabético.
Ellos podrán evaluar el estado de los pies, identificando y tratando cualquier problema temprano. De esta manera podrás evitar y prevenir complicaciones, además de brindar las recomendaciones adecuadas.
El pie diabético es una complicación grave de la diabetes, pero con cuidados y las prevenciones adecuadas, es posible evitar complicaciones.
Además de seguir las recomendaciones que indicamos, acudir frecuentemente a tu médico endocrino, vigilar y mantener un buen control de azúcar en la sangre es esencial.
Si eres diabético y buscas podólogos especialistas en pie diabético en Madrid, en clínica Moratín estaremos encantados de atenderte. Nuestro equipo de podólogas analizará todos los aspectos de tu pie, desde el estado de la piel y las uñas hasta los zapatos, tu pisada y la forma de caminar para brindarte el mejor cuidado.
Si deseas conocer más información acerca del Pie Diabético o cualquier otro aspecto de la salud de tus pies, no dudes en contactar con nosotras para concretar una consulta.
¡No lo dejes pasar más y contacta con nosotros! Encontrarás nuestra clínica podológica en el centro de Madrid, con muy buenas combinaciones para venir en transporte público y caminando.